MEDITACIÓN
ESTANDO CONMIGO MISMA
A raíz del artículo sobre la meditación aparecido el domingo pasado en el diario El Mundo, es mucha la gente que nos está contactando para preguntarnos por los talleres mensuales y las clases semanales. Además, nos preguntan qué es meditar, si es fácil, si es difícil, si ellos podrán, qué clase de meditación hacemos...
En lugar de contestar a esas preguntas, me descubro insistiendo en que meditar es para todos, no para unos pocos elegidos. Todos tenemos la capacidad de hacerlo y me atrevo a decir que casi todos, la necesidad. Para vivir lo que denominamos estado meditativo, hay innumerables técnicas y cada uno podemos ir probando y descubriendo cuál nos facilita el estar con nosotros mismos en la acepción más amplia del concepto.
La manera más sencilla que yo he encontrado para meditar es mi cuerpo, pues el flujo de pensamientos se hace más lento cuando mi atención plena está en sentirlo a través de los estiramientos y las posturas, del aire que entra y sale de mi cuerpo y lo mueve o de mi relación con mis sentidos.
No me tengo que empeñar en ello, sencillamente sucede.
No es mi objetivo, pero a veces se da.
No es complicado, solo lo tengo que permitir.
Resulta que, si no pongo mi atención en alimentar mi flujo de pensamientos, estos se ralentizan, languidecen y... dan paso al silencio. De repente, puedo darme cuenta de que he estado en el espacio entre los pensamientos y que he sentido verdadera quietud y verdadero gozo de existir.
Olga Cadenas Delgado
Profesora de yoga
Monitora de Estiramientos de cadenas musculares
Facilitadora de Trabajo con el potencial corporal
Co-directora del centro DeYoga